La visión es uno de los sentidos más importantes para conocer el mundo. Los ojos son órganos sensibles y expuestos a muchos riesgos. Desde que una persona nace hasta finalizar su vida se debe realizar constantes visitas con el especialista de salud visual, para prevención y cuidado, si no se realiza un diagnóstico puede afectar en estas etapas de aprendizaje.
El primer contacto puede ser desde el nacimiento, el cual con las herramientas adecuadas se puede realizar un tamiz ocular. La evaluación Optométrica puede realizarse desde los primeros días de vida con la instrumentación correcta, sin embargo, la mejor edad es cuando el niño comienza a realizar actividades que demanden una agudeza visual optima
Las ametropías siempre producen sintomatología, la torpeza en general, la no identificación de elementos lejanos o la confusión en sus actividades son indicativos de una posible ametropía y ahí se recomienda el examen de la salud visual
Muchos de los problemas que se presentan son debido a problemas binoculares, los que más cuesta detectar y que pueden derivar en una visión borrosa y a la larga puede redundar en un menor rendimiento escolar.
Recién Nacidos: Un pediatra o un especialista de la salud visual debe examinar los ojos del recién nacido, es importante ver su reacción cuando la luz se refleja en sus ojos.
En los bebes: Se debe realizar una segunda evaluación visual practicada por un pediatra o el especialista de la salud visual para determinar el buen estado de salud del bebe a los 6 meses y al cumplir un año de edad. ( es más recomendable que se realice a los 6 meses de vida ya que en esta etapa es donde todo el sistema visual hace lo que llamamos binocularidad, ahí se puede saber si este sistema se desarrolla con normalidad o hay que proceder a una intervención preventiva y de ahí hacer una valoración anualmente con el especialista de la salud visual
En el preescolar que es de los 3 años: Debe hacerse una evaluación de la visión y la alineación ocular del niño, se trata de la etapa en la que empiezan a usar la identificación de formas y necesitan más precisión en su enfoque.
Al ingresar a la escuela o siempre que se sospeche de un problema deben examinarse los ojos de los niños para determinar la agudeza visual y la alineación. Las consultas cumplen la función de evaluar la agudeza visual con diversos métodos para la evaluación de los niños. El uso de imágenes especiales y las respuestas que ellos dan como mirada preferencial es lo que denota el estado de su salud.
En los siguientes años que son de 3 a 12 años:
En esta etapa del desarrollo final de los niños, las consultas, como a lo largo de la vida, se deben continuar para su cuidado y prevención.
Cuando un niño posee un defecto visual que no se diagnostica y se trata a tiempo lo va interiorizando como algo normal, de echo el cerebro de los más pequeños se va acostumbrando a esa deficiencia como algo cotidiano esto contribuye a que pase desapercibido de ahí la importancia de acudir a revisiones periódicas que ofrecen la oportunidad de atajar el problema cuando resulta más efectivo.
Recuerda que salud visual es sinónimo de constante prevención cuidarte de los fenómenos de la contaminación, el aumento de la radiación UV, el uso de las pantallas y el clima.
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