¿Usas pantallas más de 4 horas al día? Esto es lo que le pasa a tus ojos 👀💻

Hoy en día pasamos gran parte de nuestro tiempo frente a pantallas: el celular, la computadora, la tablet o incluso la televisión. Sin darnos cuenta, podemos acumular más de 4 horas diarias de exposición, lo que provoca fatiga ocular, resequedad, dolores de cabeza e incluso dificultad para enfocar de lejos. A este cansancio visual se le conoce como síndrome visual informático, y cada vez más personas lo padecen. Cuando los ojos pasan demasiado tiempo frente a pantallas, comienzan a mostrar señales claras de cansancio visual. Los síntomas más comunes son visión borrosa, sensación de arenilla, enrojecimiento, resequedad, lagrimeo excesivo y dificultad para enfocar de cerca o de lejos. En algunos casos también puede presentarse sensibilidad a la luz y necesidad de entrecerrar los ojos para ver mejor. Si estos síntomas se vuelven frecuentes, es una alerta de que tus ojos están resintiendo el esfuerzo extra que

exige la exposición prolongada a dispositivos digitales.

El problema no es solo cuánto tiempo pasamos frente a las pantallas, sino también cómo las usamos: sin descansos, con poca luz o sin la protección adecuada. La iluminación de la pantalla también juega un papel clave en la salud visual. Lo más recomendable es ajustar el brillo de la computadora o celular al mismo nivel de la luz del entorno: ni demasiado alto, porque puede causar deslumbramiento e irritación, ni demasiado bajo, porque obliga a forzar la vista. Además, es mejor evitar usar dispositivos en habitaciones totalmente oscuras, ya que el contraste entre la pantalla y el entorno genera un esfuerzo extra en los ojos. Lo ideal es mantener una luz ambiental suave en el espacio de trabajo y, si es posible, activar el modo nocturno o filtro de luz cálida por las noches para reducir el impacto de la luz azul.

La buena noticia es que existen soluciones sencillas para cuidar tu vista, como usar lentes con filtro de luz azul, mantener una distancia adecuada y hacer pausas cada 20 minutos. Invertir en la salud de tus ojos no solo mejora tu rendimiento diario, también previene problemas visuales a largo plazo.